Dodge ha perdido relevancia en los últimos años, especialmente en el segmento de muscle car, con el Ford Mustang y el Chevrolet Mustang. Sin embargo, su reputación en los vehículos de alto rendimiento con motores de combustión interna permanece intacta y el nuevo y más rápido Challenger está cada vez más cerca.
Este deportivo fue evolucionando desde su surgimiento en 1969 con restylings y nuevas generaciones y versiones. De hecho, se presentó por primera vez en 2022 una variante 100% eléctrica, la cual todavía no llegó a los concesionarios. Y se lanzará próximamente, incluso antes de lo previsto, el más rápido e impresionante.
El nuevo y más rápido Dodge Challenger
Ante el crecimiento de la demanda de vehículos eléctricos, la marca estadounidense avanza en dicha línea con el Charger Daytona. Pero, al mismo tiempo, está respondiendo a las peticiones de sus seguidores al adelantar la producción del Charger Sixpack, el cual tendrá motor de gasolina y será el más veloz de la gama del muscle car.
La situación es particular. Por un lado, el mundo y las necesidades medioambientales exigen la masificación de los autos eléctricos. Por otro, el público en general sigue optando por lo clásico y confiable. Así, la demanda de motores de combustión interna impulsa el adelanto del Charger Sixpack.
A pesar de los esfuerzos de Dodge por lanzar modelos sostenibles, muchos consumidores prefieren lo tradicional, especialmente para la competición y alto rendimiento. Por eso el fabricante, junto con su empresa matriz, Stellantis, están acelerando el lanzamiento del Charger Sixpack. Estaba previsto para finales de 2025, pero podría adelantarse para mitad de año.
Otras razones que impulsan a este vehículo
La decisión de la compañía norteamericana de adelantar la presentación del Sixpack está influenciada tanto por la demanda del mercado como por los cambios en las políticas regulatorias de Estados Unidos.
Aunque las normativas de emisiones y los mandatos para vehículos eléctricos son cada vez más estrictos, Dodge encontró un espacio para satisfacer a sus clientes sin renunciar al desarrollo de sus muscle cars a combustión interna. Para esto, a su vez, es clave el hecho de que en Norteamérica las normas no son tan estrictas como en Europa.
Este panorama permite tener la tranquilidad de que el Dodge Challenger eléctrico (EV) podrá convivir sin inconvenientes con otro a gasolina que será, además, el más rápido e imponente.
Motor y potencia del nuevo Challenger
El nuevo Challenger o simplemente Charger Sixpack contará con un motor Hurricane de seis cilindros en línea de 3.0 litros, con doble turbocompresor que estará disponible en dos variantes: una con 420 CV y otra con 550. Será el muscle car más rápido de Estados Unidos o, al menos, el que mejor competirá contra los mencionados Mustang y Camaro.
Para los seguidores de Dodge, la decisión de mantener una mecánica de seis cilindros en lugar de la V8 podría ser un punto de controversia. Aunque promete y mucho, no todos los entusiastas de los muscle cars están dispuestos a renunciar al sonido profundo y característico del segundo, considerado un sello distintivo para la conducción.
¿Cuál será el futuro del muscle car?
No hay confirmación oficial sobre el futuro del Dodge Challenger. Hasta ahora lo más certero es que el fabricante evalúa la convivencia de las versiones eléctricas y de gasolina para su próximo modelo para determinar cuál despierta mayor interés.
Con una demanda dividida entre lo tradicional y lo innovador, Dodge parece estar abierta a explorar ambas opciones para satisfacer las diversas preferencias del mercado. En última instancia, el nuevo Challenger tendrá como objetivo mejorar la performance de venta de la marca englobada en Stellantis.
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